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lunes, 28 de febrero de 2011

Entrada número 111

No he hecho la tontería especial número 50, ni la 100 pero los tres solitarios (111) me parece una cantidad de entradas suficientes para hacer una pequeña reflexión sobre este blog, y soltar alguna que otra bobada, espero que sin pasarme, y no ahuyentar a los pocos y fieles seguidores GRACIAS.

La situación actual tanto a nivel mundial, nacional o incluso personal no es para tirar cohetes (en plan festivo y de celebración), pero si merece un momento de reflexión con un pensamiento, sin coacción ni manipulación externa o propia.

Tanto rollo y preámbulo solamente es para decir que: Si bien el nivel de mis comentarios (tonterías) no ha subido, tampoco se ha venido abajo en este año y pico de escribir públicamente. La variedad temática o las secciones semi fijas, como el cine o barrio sésamo, son ese tira y afloja que dan continuidad a mí experiencia de comunicación con el exterior.

Una ventaja añadida es que al haber tanta variedad y competencia, en el buen sentido, dentro del mundo de los blogs, este sólo busca compararse consigo mismo y afrontar unas metas asequibles y ponderadas; es decir, mínimas pero coherentes tanto de contenido como con periodicidad. 
Además la inclusión de unos cuantos enlaces, tanto de blogs personales, como técnicos, como de gran difusión; a los que sigo para estar en contacto con una información en la misma medida, personal, técnica y de ámbito general, me sirve para tener los pies en el suelo y desbarrar, con mesura, en mi condición de bocazas. (Esto si es un pequeño mérito por mi parte)
Un saludo y hasta la próxima tontería

Después de este inciso en las tonterías habituales, espero que la siguiente sea mas entretenida. Algunas veces hay que soltar el discursillo, para no perder el rumbo, aunque sea a costa de parar maquinas durante la travesía.


viernes, 25 de febrero de 2011

Cine: Cisne Negro y poco brillante

Hay que ver de todo, me refiero a géneros cinematográficos, y no posicionarse sin haber sido espectador. En esta ocasión y aceptando de buena gana lo que ocurriera en la pantalla acepté el desafío de ver una película cuya temática no me atraía.


Me refiero a Cisne Negro sin haber leído crítica alguna y solamente con la guía de unos cuantos comentaríos muy favorables hacía la protagonista Natalie Portman aproveche el día del espectador para su visionado. Mi primera impresión coincidió con la última, justo antes de salir los títulos de crédito.


Mi reflexión fue la siguiente, el Twitter me sirve de hemeroteca:
jm_vanjav 
Ayer viendo el cisne negro llegué a la conclusión que al director le gustaba menos el ballet que a mi. 
#reflexion
Así de sencilla y contundente fue me impresión. No voy a discutir ni contradecir a quienes opinar que Natalie está expendida en el papel, ciertamente hace una gran interpretación. La pega es que el resto de la película no está a su altura y por ello resalta tanto en su rol, al margen de su buen hacer.

La forma de mover la cámara, el cambio de planos y sobre todo las escenas de ballet me parecen muy mediocres, con falta tanto de soltura como de saber hacer. La historia truculenta, engañosa, y la metamorfosis del personaje lo admito pero tampoco le veo brillantez en cuanto a su ejecución, yo diría falto del gusto y la sensibilidad que el tema pide.

Buscar un cierto humor mal sano o detallar escenas de dentera me parecen de mal gusto o fuera de lugar para la temática y el tono de la historia presentada. Una película que trata sobre el arte hasta la perfección con estos contrapuntos mas que un equilibrio denota falta de gusto y sensibilidad. Hay formas de decir y maneras de mostrar; para eso están los directores.

Puede que hay sido demasiado estricto en mi opinión, pero con una película pretenciosa y que aspira a ser la mejor del año, no me voy a cortar ponderando la gran actuación de la bailarina, omitiendo que el resto de la producción no está a la misma altura y ni siquiera hecho con gusto. Si en una paella, te dicen que los langostinos están ricos, quiere decir que el arroz, la base de la misma, no estaba bueno.

martes, 22 de febrero de 2011

Trivialidades en un día gris de lluvia

Que mejor ocasión, en un día gris y lluvioso, para despotricar de todo, y por desgracia, con mas razón que vehemencia. En estas ocasiones nuestro ánimo se mimetiza con el húmedo, frío y gris ambiente; igual que un pulpo engaterado en un una roca.

Mi primer berrido es contra las interminables obras municipales, mal común a todas las ciudades que conozco, y me aventuro con las que no. En estos desapacibles días, por un lado tenemos las inclemencias naturales, viento, lluvia, sensación térmica... y por otro las urbanísticas, obras, andamios, barreras arquitectónicas (bolos y bolas)... La combinación de lo natural y de lo urbano es una mezcla explosiva que requiere toda nuestra atención para evitar sufrir un accidente. Como somos muy listos y hábiles, generalmente salimos indemnes; pero algo de lo que nadie que yo conozca, y porfío que nadie desconocido, se libra de pisar una, dos, o tres, o ... baldosas trampa, en el desplazamiento a nuestro destino. Es mas humillante que perjudicial, y el humor que se nos pone es desproporcionado, pero en estas situaciones nos permitimos ese desahogo para compensar nuestra impotencia al clima, al estado de las calles y sobre todo a no podernos quedar en casa en días así.

Segundo alarido: La cantidad no indica variedad, me refiero a la TDT. Recuerdo cuando me quejaba por sólo poder ver una cadena y perderme todas las series y películas de la dos. En aquella época las horas de visionado estaban bien definidas y permitía realizar otras actividades, con la incorporación del UHF (la 2) la cosa mejoró, mas variedad y series míticas, pero el horario de visionado no aumento en gran medida. Me salto el período de las privadas, no me parece relevante para este momento, y voy al estado actual. Tenemos 40 canales libres de TDT o más, y a la hora de la verdad hay grandes franjas horarias sin programación. Todo se aglutina en las horas de mas audiencia y, por ejemplo, de madrugada nos podemos morir de asco si no nos gusta la tele-venta, los horóscopos o adivinas y los concursos amañados con números telefónicos caros. Si se duerme bien, lo pasamos por alto por que no nos enteramos, pero si hay una situación que nos impide dormir y necesitamos entretenimiento, es preferible poner la radio a gastar los botones del mando a distancia del televisor zapeando en busca de lo que no vamos a encontrar. 

En invierno también hay flores
Podía seguir aullando, pero por mucho que me enrolle y por decir mas tonterías, no voy a evitar pisar otra baldosa trampa cuando vuelva a casa y, si además, tuviera problemas para conciliar el sueño, no iba tampoco a encontrar una cadena de Tv que me ayudara hasta que Morfeo me levantara la imaginaría. 

jueves, 17 de febrero de 2011

Más allá de la vida y del cine basura

Clint Eastwood presenta una película tan sencilla como convincente abordando un tema, muy dado al escepticismo o al fanatismo, salvado con elegancia en esta obra.


Más allá de la vida, el título no engaña, recoge las experiencias de varios personajes dispares que, también de diferentes motivos, se han enfrentado o encontrado en esta situación limítrofe, entre lo que llamamos vida y la muerte. Las historias son sencillas y el desarrollo de las mismas acaba con una conexión entre ellas, como desenlace de una trama lineal y sin trampas.


Es estilo narrativo mimetiza con la ubicación de las escenas, así a mi modo de ver, la película es dos terceras partes europea, en cuanto a concepción y desarrollo (incluido el desenlace) y el resto fabricación USA. Lo que está claro, es que Clint no es un novato contando historias y sabe, a pesar de un ritmo lento, de escenas largas y con bastante diálogo, entretener y que nos dejemos llevar las dos horas de proyección.


Creo haber leído por ahí que clasifican a esta historia una obra menor del director. Bueno, no es la mejor de su carrera, pero tampoco es menor, para mi es mas que digna y confundir una historia sencilla con una simpleza, ya denota la profundad de quien lanzó semejante comentario. También las cinco notas iniciales de la 5ª Sinfonía de Beethoven son sencillas, pero sólo se le ocurrieron a él.


Para mi una curiosidad de la película es el despliegue de Efectos Especiales (FX) del principio, algo que no recuerdo en la filmografía de Clint Eastwood, y que por otra parte están justificados, dando pie a uno de los ovillos de la trama. Otra cosa que le puedo agradecer, sé de su carácter crudo narrativo en algunas ocasiones, es la forma de tratar las escenas dramáticas sin recrearse ni buscando el morbo, aunque es difícil que no se nos escape alguna lágrima en la historia de los niños, la mas sensible de las tres que se van simultaneando en la pantalla. 


Por último, y sin descubrir el final, la forma en que aborda el delicado tema que a todos nos llegará, es realista y abierto, sin buscar fantasmas ni crear tensiones. Tal vez después de verla, nuestra opinión sobre el asunto sea mas en la línea del film, sin aferrarnos a convencionalismos tanto religiosos como escépticos. Resumiendo, para mi, es una película dramática que no busca hacer daño innecesario, da una tercera alternativa al enigma de la vida de una manera tan simple y elegante; que se podría confundir con algo insulso y vacío, si buscáramos comparaciones, por otra parte innecesarias.

viernes, 11 de febrero de 2011

El twitter y los famosetes

Si hay una red social viva, activa y directa es el Twitter. Funciona casi en tiempo real y te informas lo mismo de novedades técnicas, chismes, noticias y comentarios personales, dependiendo de a quien sigas. Su crecimiento y popularidad es patente por el número de mensajitos generados.


Con estas características es normal que haya muchos conocidos, famosos, artistas y similares que se apunten. Rápidamente su número de sus seguidores crece y es una forma para ellos de estar próximos a la gente y compartir, como digo yo, SMS con los fans.


Hasta aquí todo es correcto y para nada censurable, si no, todo lo contrario. Lo que alguno de estos famosetes ignora, de esta moda social, es que sus opiniones o comentarios son tan públicos como si fueran dichos a los cuatro vientos. En estas últimas semanas, ha habido unos cuantos que han largado incongruencias o han perdido los papeles, convirtiendose en ídolos de barro de pies a cabeza. (:> :P


Twitter, gracias a lo que comenté al principio, pone a cada uno en su sitio y sirve de escarmiento a estos engreídos de si mismos en su momento de verborrea, cuando menos, desafortunada (voy a ser políticamente correcto en esta ocasión). Y lo mejor, los que participamos en ese escarmiento popular, nos sentimos un poco mas vivos. Es fácil que pasemos de seguidores a perseguidores de alguien, cuando este haciendo uso de su popularidad, juega un poquito a Dios, y como buenos feligreses (del Twitter) nos sublevamos. (:> :-)


Afortunadamente, hay famosos de verdad, que cuando twittean lo hacen como personas normales que se comunican con otras personas sin establecer diferencias y aceptando las reglas de juego como uno mas. Este es otra de las causas de por que esta red tiene este gran exito.


Para terminar diré que he evitado nombrar tanto a los famosetes como a los famosos. Quien esté interesado puede ver por si mismo lo que acabo de comentar por aquí y de paso participar en una forma de comunicación social divertida y entretenida.