No voy a contar la historia, en esta reseña, porque no viene a cuento, la lectura hay que disfrutarla desde la tapa hasta la contraportada. Todo lo que está entre medio es lo que nos debe dar rienda suelta a la imaginación y cada uno tenemos la nuestra.
La cubierta y las ilustraciones interiores son obra de Andrea Obregón Mantecón (blog).
El relato de esta épica aventura esta estructurado similar al curso de un río; navegamos por él directos a la desembocadura de la trama, sin perder nunca la perspectiva de las orillas, con suficiente corriente y algún que otro rápido, para mantener el interés a lo largo de su recorrido hasta el final de la novela.
Todos los personajes tienen su personalidad, en especial la protagonista, rebelde pero con conciencia, autodidacta con todo lo que la acontece y tolerante, queda claro que nació en una época equivocada. El resto, también son especiales, con un rol más limitado, siendo engranajes necesarios de la maquinaria.
Desde el comienzo se ven las inquietudes de la muchacha protagonista y como debe tener que tomar importantes decisiones impropias de su situación y edad. La aventura comienza desde el principio, como debe ser, para coger impulso a una trama que va en crescendo. Las diversas paradas por el camino quedan reflejadas en cada capítulo para darnos un respiro y poder poner el marca páginas a la espera del siguiente.
La lectura es fácil, se podría leer de un tirón en una buena sobremesa, eso no quita que la trama incluya referencias sobre discriminación, libertades, igualdad, tolerancia, ecología o, hasta, espiritualidad. Hay pasajes de reflexión y también escenas de acción al más puro estilo vídeojuego.
La novela se podría definir como: Aventuras futuristicas con un toque de fantasía para todas las edades; por lo que contaría con un amplio abanico potencial de lectores. Para mi, lo fundamental de una lectura, es que me entretenga y, como así ha sido, no voy a poner peros a su lectura. Podría debatir algún aspecto más, pero tendría que entrar en detalle y descubrir cosas que es mejor hacerlo leyéndola.
Por cierto, la autora, es vecina de blog en El Blog de Lídia
La cubierta y las ilustraciones interiores son obra de Andrea Obregón Mantecón (blog).
El relato de esta épica aventura esta estructurado similar al curso de un río; navegamos por él directos a la desembocadura de la trama, sin perder nunca la perspectiva de las orillas, con suficiente corriente y algún que otro rápido, para mantener el interés a lo largo de su recorrido hasta el final de la novela.
Todos los personajes tienen su personalidad, en especial la protagonista, rebelde pero con conciencia, autodidacta con todo lo que la acontece y tolerante, queda claro que nació en una época equivocada. El resto, también son especiales, con un rol más limitado, siendo engranajes necesarios de la maquinaria.
Desde el comienzo se ven las inquietudes de la muchacha protagonista y como debe tener que tomar importantes decisiones impropias de su situación y edad. La aventura comienza desde el principio, como debe ser, para coger impulso a una trama que va en crescendo. Las diversas paradas por el camino quedan reflejadas en cada capítulo para darnos un respiro y poder poner el marca páginas a la espera del siguiente.
La lectura es fácil, se podría leer de un tirón en una buena sobremesa, eso no quita que la trama incluya referencias sobre discriminación, libertades, igualdad, tolerancia, ecología o, hasta, espiritualidad. Hay pasajes de reflexión y también escenas de acción al más puro estilo vídeojuego.
La novela se podría definir como: Aventuras futuristicas con un toque de fantasía para todas las edades; por lo que contaría con un amplio abanico potencial de lectores. Para mi, lo fundamental de una lectura, es que me entretenga y, como así ha sido, no voy a poner peros a su lectura. Podría debatir algún aspecto más, pero tendría que entrar en detalle y descubrir cosas que es mejor hacerlo leyéndola.
Por cierto, la autora, es vecina de blog en El Blog de Lídia